Climate Connect: Navegando por la tecnología limpia y la transición energética

Invertir en infraestructura hídrica es un componente crítico de la mitigación de incendios forestales. Desde mejorar la capacidad de almacenamiento hasta implementar sistemas de riego inteligentes, hay numerosas formas de mejorar la resiliencia del agua y reducir los riesgos de incendios.

El imperativo de un almacenamiento de energía a escala de red robusto, eficiente y rentable nunca ha sido más agudo. Mientras que las baterías de iones de litio han dominado el discurso y los despliegues iniciales, una nueva frontera está surgiendo en la intersección de la inteligencia artificial y la ciencia de materiales avanzados.

El almacenamiento de energía a largo plazo (LDES) es una oportunidad para remodelar el panorama energético al abordar los desafíos de intermitencia de la energía renovable. LDES permite una mayor penetración de la energía solar y eólica, reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y mejora la resiliencia de la red.


Los incendios forestales representan una amenaza creciente para las comunidades y economías, y la infraestructura energética obsoleta contribuye significativamente a los riesgos de incendio. La transición a la energía renovable ofrece una solución viable para mitigar estos peligros mientras se avanzan los objetivos climáticos.