Los desafíos clave para los vehículos eléctricos
La revolución de los vehículos eléctricos (EV) está en pleno apogeo y muchos de los principales fabricantes de automóviles están desarrollando una gama de modelos de vehículos eléctricos para todas las necesidades de los consumidores. A medida que varias ciudades de todo el mundo anuncian prohibiciones futuras de vehículos con motor de combustión interna (ICE), la necesidad de fabricar rápidamente vehículos eléctricos es clara. Sin embargo, persisten varios desafíos entre la producción de vehículos eléctricos y su adopción generalizada. Estos incluyen la falta de cadenas de suministro regionales, las dificultades para lograr precios competitivos, la autonomía de los vehículos eléctricos, la escasez de infraestructura de carga y el mercado mundial de vehículos eléctricos relativamente pequeño en la actualidad.
Desarrollo de cadenas de suministro regionales: el dominio de China
Un desafío que se hizo abrumadoramente evidente durante la pandemia de Covid-19 fue la dificultad para obtener piezas en la estructura de la cadena de suministro global existente. Muchas piezas de vehículos eléctricos se fabrican en China, que actualmente domina el mercado de semiconductores, lo que dificulta que los productores de vehículos eléctricos accedan a estas piezas en otras partes del mundo cuando se interrumpen las cadenas de suministro. Esto ha llevado a Estados Unidos y varios otros países a invertir en el desarrollo de cadenas de suministro regionales.
Además de los componentes necesarios para fabricar vehículos eléctricos, las actividades mineras son de vital importancia para la producción de baterías de iones de litio necesarias para hacer funcionar los vehículos eléctricos y otros dispositivos eléctricos. En la actualidad, China domina el mercado del litio y en 2022 proporcionará alrededor del 60% del suministro mundial de productos químicos de litio.
Esperamos ver inversiones en minería y fabricación regionales para ayudar a disminuir la dependencia de Estados Unidos de China para las piezas de vehículos eléctricos, así como crear nuevos e importantes centros de vehículos eléctricos en toda la región. Por ejemplo, varios fabricantes de automóviles importantes están desarrollando operaciones en México, incluido Tesla, que tiene planes de construir una gigafábrica en el norte del país. Mientras tanto, esperamos que el desarrollo del triángulo del litio, entre Chile, Bolivia y Argentina, ayude a Estados Unidos a obtener un mayor acceso a materiales vitales para baterías.
Precio competitivo
Una de las mayores limitaciones para el lanzamiento de vehículos eléctricos es la incapacidad de lograr precios competitivos. Esta es también un área en la que a China le está yendo mejor que a sus competidores: el precio medio de un vehículo eléctrico en China es alrededor de un 10% más alto que el de un automóvil convencional, en comparación con entre un 45% y un 50% más alto en otros mercados importantes.
Pero la esperanza está en el horizonte con planes para un vehículo eléctrico de 25.000 dólares. Tesla anunció que espera que su automóvil de nueva generación tenga un precio inicial de entre 25.000 y 30.000 dólares. Esperamos que este anuncio impulse a otros fabricantes de automóviles a ser más competitivos en sus precios, reduciendo los costos para fabricar modelos que sean más competitivos con el mercado chino.
Expansión del mercado e infraestructura de carga
La distancia que los vehículos eléctricos pueden recorrer entre cargas ha aumentado significativamente en los últimos años, gracias a las innovaciones tecnológicas. Pero la percepción pública sobre la autonomía de los vehículos eléctricos sigue siendo mala. La autonomía de las baterías de los vehículos eléctricos ha aumentado de unas 100 millas con una sola carga hace 15 años a más de 300 millas en la actualidad. Los fabricantes de automóviles deben cambiar la percepción pública sobre la autonomía de los vehículos eléctricos para animar a los consumidores a hacer el cambio.
Además, Estados Unidos y muchos otros países del mundo deben desarrollar planes integrales de infraestructura de carga de vehículos eléctricos e invertir fuertemente en el despliegue de instalaciones de carga en todo el país. Las políticas nacionales podrían respaldar este despliegue ofreciendo a las empresas privadas exenciones fiscales y otros incentivos fiscales para invertir en infraestructura de carga.
Hasta ahora, el precio de un vehículo eléctrico en comparación con un vehículo ICE ha disuadido a muchos consumidores de hacer el cambio. Muchos de aquellos que podían permitirse un vehículo eléctrico también se sintieron desanimados por la autonomía limitada del vehículo, así como por la necesidad de infraestructura de carga disponible. Sin embargo, con las recientes innovaciones que conducen a vehículos eléctricos más baratos y de mayor autonomía, los fabricantes de automóviles tienen un gran potencial para desarrollar el mercado de vehículos eléctricos.
Nuestra perspectiva sigue siendo positiva
Varios desafíos se interponen en el camino de la expansión del mercado de vehículos eléctricos y del cambio generalizado de los consumidores de los vehículos ICE a los vehículos eléctricos. Sin embargo, gracias a las innovaciones recientes, el desarrollo de cadenas de suministro regionales y la inversión pública y privada en el mercado de vehículos eléctricos, prevemos que los fabricantes de automóviles superarán la mayoría de estos desafíos para finales de la década.