Las cinco principales tendencias en tecnología climática para 2025
A medida que se intensifica la crisis climática global, están surgiendo soluciones impulsadas por la tecnología para abordar los desafíos ambientales más apremiantes. Desde la mitigación de incendios forestales hasta el avance de la energía renovable, estas innovaciones transforman las industrias y aceleran la sostenibilidad. A continuación, exploramos las cinco tendencias principales en tecnología climática para 2025 y más allá.
1. Innovaciones tecnológicas contra incendios forestales
Los incendios forestales se han convertido en un problema mundial devastador impulsado por el aumento de las temperaturas, las sequías prolongadas y la deforestación. En respuesta, una nueva ola de tecnologías contra incendios forestales está remodelando la forma en que predecimos, prevenimos y combatimos estos desastres. Se están implementando sistemas de monitoreo por satélite, modelos de riesgo basados en inteligencia artificial y drones automatizados contra incendios para salvar vidas y ecosistemas.
Esperamos que el mercado de tecnologías contra incendios forestales crezca a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de aproximadamente el 18% para 2030, impulsado por mayores inversiones en análisis de inteligencia artificial y medidas de resiliencia climática. Las empresas especializadas en software predictivo, como el mapeo de riesgos en tiempo real, están consiguiendo contratos tanto con gobiernos como con ONG.
Sin embargo, el sector enfrenta desafíos, incluidos los altos costos de implementación y la naturaleza impredecible de los incendios forestales. A pesar de esto, los avances en el aprendizaje automático y la integración con dispositivos IoT prometen mejorar la precisión de las predicciones y respuestas a incendios, posicionando este mercado para un crecimiento sostenido.
2. Ampliación de la energía renovable
Las energías renovables siguen estando a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático, con las tecnologías solar y eólica a la cabeza. La mejora de la eficiencia y la reducción de los costos han convertido a la energía renovable en la fuente de energía más competitiva en muchas regiones. Los enfoques innovadores, como los parques solares flotantes y las turbinas eólicas marinas, están superando limitaciones espaciales y geográficas.
Esperamos que las inversiones globales en energía renovable superen los $2 billones en 2024. Este crecimiento está respaldado por políticas gubernamentales que promueven la adopción de energía limpia y la urgente necesidad de reemplazar la infraestructura de combustibles fósiles envejecida.
Sin embargo, el rápido crecimiento de las energías renovables enfrenta obstáculos, incluidos retrasos en los permisos, desafíos de integración de la red y cuellos de botella en la cadena de suministro para componentes como las palas de las turbinas eólicas. Abordar estos problemas requerirá esfuerzos globales coordinados para modernizar los sistemas de redes y agilizar las aprobaciones de proyectos.
3. Expansión del almacenamiento de energía
El almacenamiento de energía es un punto de inflexión para la transición a la energía limpia, al abordar la intermitencia de las energías renovables como la solar y la eólica. Tecnologías como las baterías de flujo y de iones de litio y las soluciones emergentes como el almacenamiento de hidrógeno permiten un suministro de energía renovable confiable las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Esperamos que el mercado mundial de almacenamiento de energía crezca de 256 mil millones de dólares en 2023 a aproximadamente 500 mil millones de dólares para 2030. La disminución de los costos de las baterías, los avances tecnológicos y la mayor demanda de estabilidad de la red impulsan este crecimiento.
A pesar de su potencial, el sector enfrenta desafíos como limitaciones en el suministro de materiales e ineficiencias en el reciclaje de baterías. Sin embargo, se espera que la investigación en curso sobre químicas alternativas, como las baterías de estado sólido, aborde estos problemas, allanando el camino para un ecosistema de almacenamiento más sostenible.
4. La electrificación del transporte
El transporte está experimentando un cambio monumental hacia la electrificación, impulsado por los avances en los vehículos eléctricos (EV) y la infraestructura de apoyo. Los gobiernos de todo el mundo incentivan la adopción de vehículos eléctricos con créditos fiscales, subsidios y regulaciones estrictas sobre emisiones, lo que hace que el transporte eléctrico sea más accesible.
Esperamos que las ventas mundiales de vehículos eléctricos alcancen aproximadamente el 30% de las ventas totales de vehículos para 2030, frente a solo el 15% a finales de 2023. Además, los vehículos pesados como camiones y autobuses eléctricos están preparados para un crecimiento significativo, respaldado por inversiones en carga. electrificación de redes y flotas.
Para 2030, se prevé que los principales fabricantes de automóviles del mundo representen más del 70% de la producción mundial de vehículos eléctricos, un salto significativo con respecto a su participación de menos del 15% en 2024. Si bien este aumento en la fabricación de vehículos eléctricos ofrece a los consumidores una gama cada vez mayor de opciones y tasas de lealtad sin precedentes entre los compradores de vehículos eléctricos que regresan, persisten desafíos críticos. El principal de ellos es abordar las preocupaciones de los consumidores sobre la ansiedad por el alcance, especialmente para las personas que no tienen acceso a soluciones de carga en el hogar o quienes se embarcan en viajes de larga distancia.
Superar estos obstáculos requiere un enfoque colaborativo entre múltiples sectores. La industria automotriz, los proveedores de servicios públicos, los gobiernos y los propietarios privados (como centros comerciales y complejos de departamentos) deben trabajar juntos para expandir y optimizar la infraestructura de carga de vehículos eléctricos. A medida que estos esfuerzos se alineen, se espera que la trayectoria de la electrificación de vehículos se acelere exponencialmente, allanando el camino para una adopción más amplia y un futuro de transporte más sostenible.
Además, los problemas en la cadena de suministro de minerales críticos como el litio y el cobalto y las disparidades regionales en la infraestructura de carga también plantean riesgos importantes. La colaboración entre fabricantes de automóviles, gobiernos y proveedores de tecnología será crucial para superar estas barreras y garantizar un acceso equitativo al transporte limpio.
5. Crecimiento de la economía del hidrógeno
El hidrógeno verde está ganando rápidamente atención como un vector energético versátil capaz de descarbonizar sectores difíciles de reducir, como la industria pesada y el transporte de larga distancia. Producido con energía renovable, el hidrógeno verde ofrece una alternativa sostenible a los combustibles fósiles.
Esperamos que el mercado mundial del hidrógeno verde crezca sustancialmente durante la próxima década. Creemos que el mercado crecerá aproximadamente un 40% anual, superando los 350 mil millones de dólares para 2034. Países como Alemania, Australia y Japón están a cargo de invertir en instalaciones de electrolizadores y redes de distribución de hidrógeno a gran escala.
Las empresas multinacionales de los sectores de la automoción, la energía y la industria pesada se están comprometiendo a lograr emisiones netas cero. Por ejemplo, Shell, BP, TotalEnergies y Siemens Energy están invirtiendo fuertemente en hidrógeno verde como parte de sus estrategias de descarbonización.
A pesar de su promesa, la economía del hidrógeno enfrenta altos costos de producción y una infraestructura limitada. La competencia entre el hidrógeno verde y el azul (producido a partir de gas natural con captura de carbono) añade complejidad a la dinámica del mercado. Sin embargo, se espera que la disminución de los costos de las energías renovables y los electrolizadores haga que el hidrógeno verde sea cada vez más competitivo.
El capital de riesgo y las colaboraciones estratégicas están impulsando la innovación
Estas cinco tendencias principales demuestran la increíble innovación e inversión que impulsan el sector de la tecnología climática. Desde la mitigación de incendios forestales hasta el aumento de la energía renovable, estos avances allanaron el camino hacia un futuro más sostenible. Si bien cada industria enfrenta desafíos únicos, las oportunidades de crecimiento e impacto son inmensas. Al abordar estas barreras mediante la colaboración, la inversión de capital de riesgo y los avances tecnológicos, podemos acelerar la transición hacia una economía baja en carbono y salvaguardar nuestro planeta para las generaciones futuras.